¿Las ondas alfa ayudan a estudiar?
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Cuando grupos de neuronas se disparan juntos de una manera determinada para enviar señales a otros grupos de neuronas, los patrones resultantes se conocen como ondas cerebrales. Estos patrones eléctricos están asociados a diferentes tipos de actividad en el cerebro, así como a diferentes estados de conciencia.
Las ondas alfa suelen producirse cuando se realizan actividades como soñar despierto, meditar o practicar la atención plena. Las investigaciones sugieren que este tipo de ondas cerebrales puede desempeñar un papel en la reducción de los síntomas de la depresión y en la mejora de la creatividad.
Hay cinco tipos diferentes de ondas cerebrales. Las ondas cerebrales se miden con una herramienta conocida como electroencefalograma (EEG). La imagen que crea la herramienta retrata esta actividad eléctrica de una forma que se parece a las ondas.
Ondas cerebrales
Entrar en un estado mental de flujo puede resultar bastante mágico. Son esos momentos en los que se pierde la noción del tiempo (en el buen sentido) y se entra en un estado de concentración tranquilo y creativo que da como resultado un aprendizaje rápido y un rendimiento potente.
En su exitoso libro “Deep Work: Rules for Focused Success in A Distracted World”, el autor y profesor Cal Newport explica que “la mayoría de las personas han perdido la capacidad de profundizar, y en su lugar pasan sus días en un frenético desenfoque de correo electrónico y redes sociales, sin darse cuenta de que hay una forma mejor.”
Las ondas alfa se encuentran en el centro de tu espectro de ondas cerebrales, entre 8-12 Hz. Cuando tu cerebro funciona en la frecuencia alfa, eres capaz de absorber nueva información con facilidad y eres significativamente más creativo.
Gracias a los 86.000 millones de células nerviosas que hay en el cerebro, siempre hay algún tipo de actividad eléctrica en su interior, y en diferentes momentos del día predominan diferentes ondas. Cuando te despiertas por la mañana, por ejemplo, tu cerebro pasa de las lentas ondas delta del sueño a las ondas theta de baja frecuencia que actúan como un portal entre el mundo del sueño y el de la vigilia. Luego están las ondas beta “de alerta”, cuando se está ocupado en la resolución de problemas o en la toma de decisiones, y las ondas gamma, aún más rápidas, cuando se está lleno de adrenalina y energía, realizando febrilmente varias tareas para completar listas de tareas imposibles.
Concentración de ondas cerebrales
En cualquier tarea, para mejorar el rendimiento, es importante rendir al máximo en situaciones individuales y obtener las habilidades necesarias de antemano. En general, el desarrollo de la capacidad de un individuo a través del entrenamiento o del rendimiento, específico para cada actividad, permite un mejor desempeño. Por otra parte, un estado psicológico óptimo que contribuya a estos objetivos puede ser un factor de promoción común a varios tipos de actividad. El estado psicológico óptimo más prometedor es la experiencia de flujo propuesta por Csikszentmihalyi (2000). Según Csikszentmihalyi (2000), que propuso originalmente este concepto, el flujo es la “sensación holística que sienten las personas cuando actúan con total implicación”. El estado de flujo se caracteriza por una sensación de recompensa intrínseca experimentada durante la inmersión en una actividad. El flujo se ha investigado en un amplio espectro de actividades; por ejemplo, jugar al ajedrez (Abuhamdeh y Csikszentmihalyi, 2009) y escalar en roca (Fave et al., 2003). Las características comunes del flujo (Nakamura y Csikszentmihalyi, 2009) se resumen en dos condiciones de flujo y seis estados subjetivos de flujo, como se muestra en la Tabla 1.
Comentarios
En mi post anterior, hablé de los cuatro tipos diferentes de ondas cerebrales y de cómo el estado de ondas cerebrales alfa es el estado óptimo para el aprendizaje. Cuando nuestro cerebro está en estado alfa, tenemos el mayor acceso a nuestras habilidades de pensamiento de orden superior. Estamos en un estado de concentración relajada que es perfecto para el aprendizaje, la realización de exámenes o cualquier otra cosa que requiera nuestra atención y concentración.
Yo dirijo mis clases de física en la universidad a través de un proceso rápido de estado alfa antes de cada prueba o examen. El proceso descrito a continuación es uno que aprendí originalmente de Quantum Learning y luego lo modifiqué y adapté para mis clases. En general, dirijo el proceso desde el frente del aula mientras modelo los pasos para los estudiantes. Digo cada paso casi exactamente como está escrito.
Este proceso permite que alguien pase rápidamente al estado alfa porque nuestros estados mentales, emocionales y físicos están todos conectados (más sobre esto en un futuro post). Cada paso en el proceso del estado alfa está diseñado para cambiar uno de los tres estados, que también afecta a los otros dos. Por ejemplo, sentarse erguido cambia el estado físico a uno más seguro, que luego tiene un efecto positivo en los estados mental y emocional.